América gana a Xolos, es líder, está clasificado y listo para el Clásico

64ec3d066554ed81e51dddaeaa50557a_full379Ciudad de México, Octubre 01 (2013).- Once partidos le bastaron al América para convertirse en el primer invitado a la próxima Liguilla. Así de claro y conciso. Y aunque las matemáticas lo confirmarán hasta las últimas jornadas de este torneo, con 28 puntos es imposible que la calificación se le escape al campeón, y más si sigue manteniendo este nivel de juego que marca la pauta de la competencia.

Para muestra el juego de esta noche, donde Miguel Herrera hizo gala del enorme poderío que ostenta su equipo en este momento y lo parejo que tiene a todo su plantel. Con seis cambios en su once titular, sin sobresaltos, venció 2-0 a Tijuana, en el primero de los dos partidos pendientes que tenía en la agenda. Ahora, los cañones americanistas apuntan al Clásico contra Chivas.

Hoy, las Águilas son más líderes que nunca y no solo por los 28 puntos que suman en estos instantes (seis más que León, segundo de la tabla general), sino por lo parejo y compenetrado que luce.

El Piojo tocó todas sus líneas sin que se descompusiera su equipo: en la defensa Adrián Aldrete y Erick Pimentel suplieron a Miguel Layún y al Topo Valenzuela; la media fue nueva por completo con Jesús Molina, Osvaldo Martínez y Andrés Andrade en lugar del Negro Medina, Luis Mendoza y Rubens Sambueza; adelante, solo metió a Narciso Mina por Raúl Jiménez, quien está concentrado con la selección.

Lo de esta noche es un adelanto de lo que presentara Herrera en el último tercio de torneo donde, como él mismo lo ha declarado, rotará a su plantilla; y si las cosas le salen como ayer, el Piojo tendrá un serio dilema a la hora de encarar la Liguilla y tener que escoger a su once titular.

El juego contra Tijuana fue un escalón más de la inercia que trae este América. Aunque Xolos ya no luce como en sus mejores épocas, aún mantiene un cuadro respetable que poco pudo hacer en el Azteca. Apenas al minuto siete las Águilas tuvieron la primera de peligro, a través de un centro de Osvaldo Martínez que encontró solo a Narciso Mina; sin embargo, el ecuatoriano conectó un cabezazo justo a la posición de Cirilo Saucedo.

Información y foto: Milenio