Repudian activistas feminicidios en Aguascalientes

Aguascalientes, Enero 26 (2021).-En un posicionamiento enviado a medios de comunicación, la Comunidad Feminista mostró su indignación por los dos recientes feminicidios acontecidos la semana pasada en territorio estatal, el primero de ellos en la carretera 45 sur metros antes de la puerta de acceso donde hay retén militar, y luego el otro caso descubierto en la colonia La Barranca, cerca del río San Pedro. En ambos casos la Fiscalía General del Estado los estableció como móvil pasional.

Posicionamiento:

Los asesinatos de nuestras hermanas víctimas de la violencia feminicida, el miércoles 20 y el domingo 24  de enero, son una muestra terrible del extremo de la violencia en contra de las mujeres. Sus muertes, sus asesinatos que reconocemos como feminicidios, nos llenan de tristeza y rabia, pero nos incitan a la exigencia de justicia y al llamado a la sociedad a garantizar un debido proceso, sin revictimización e impulsado por la lucha en contra de la impunidad, que permite que se arrebate la vida de las mujeres.

Le recordamos a las autoridades en turno, a la opinión pública y a cada uno de los sectores que conforman nuestra sociedad, que la vida de las mujeres y el derecho a una vida libre de violencia no está a discusión y que la amparan la Ley General de Víctimas, la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, así como la misma Carta Magna, a las que se suman tratados internacionales que señalan la protección de la vida de las mujeres como prioridad de una sociedad que se precie de ser justa.

¡Basta ya de violencia feminicida! Basta ya de la amenaza constante que se ciñe sobre la vida de las mujeres, víctimas de la impunidad, de la violencia patriarcal, de una sociedad que sigue sin reconocer y menos defender los derechos de sus ciudadanas, que constituyen más del cincuenta por ciento de la población. Basta ya de ver las vidas de las mujeres como secundarias, como desechables, como poco dignas de consideración, de justicia y reivindicación. Basta ya de no estar seguras ni en la calle ni en nuestras casas, con conocidos o desconocidos. Basta ya de esa violencia misógina que acaba lo mismo con las más pequeñas que con las mayores. Basta ya de seguir alimentando un sistema que devora a sus hijas. Basta de no encontrar seguridad en las instancias que deberían protegernos, de encontrar odio en quien dice que nos ama, violencia en donde debería de haber cuidado, indiferencia en donde se supone que importamos.

Merecemos vidas libres de violencias que de una y más maneras nos quebrantan y silencian. Merecemos ser reconocidas en todos y cada uno de los ámbitos en que nos desenvolvemos, merecemos ser escuchadas. Merecemos espacios seguros y compañías con quienes compartirlos, sin miedos ni necesidad de tener siempre preparadas estrategias de defensa.

Añadimos también todo nuestro cariño y apoyo a las familias de las víctimas, con quienes compartimos indignación, digna rabia, hambre de justicia y energías para exigir, por este y por todos los medios que sea necesario. Hoy como siempre, no están solas. Si tocan a una, respondemos todas.