Condena PRD suspensión de clases por parte de la CNTE
Aguascalientes, Agosto 22 (2016).-La Dirigencia del Partido de la Revolución Democrática (PRD), criticó severamente a la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) por dejar sin clases a millones de estudiantes bajo el argumento llamado -Reforma Educativa-, el Presidente, Emanuelle Sánchez Nájera condenó la actitud de los mentores en paro.
Sánchez Nájera, recriminó una y otra vez el método empleado por los maestros paristas al señalar que nada justifica el que se deje sin clases al alumnado, por una inconformidad entre el Gobierno Federal y su Organización. “Por muchos derechos que tengan los profesores, nada justifica que violenten las garantías de los alumnos”, abundó el líder del sol azteca.
Añadió que lo más lamentable del movimiento magisterial disidente, es que los más afectados, son aquellas entidades con mayores grados de analfabetismo “ahí están los más perjudicados”, resaltó el dirigente perredista quien no solo cuestionó el paro laboral, rechazó categóricamente el acoso y persecución de la que son objeto los docentes que no coinciden con medidas radicales de la Coordinadora.
El declarante, saludó la actitud de los profesionales de la educación en la entidad los cuales a pesar de estar en desacuerdo con la “Reforma Educativa”, no se desquitan con el alumnado, por el contrario, Aguascalientes es de los estados que hoy día cumplen a cabalidad el arranque del ciclo escolar 2016-2017, destacó Emanuelle Sánchez Nájera.
Acotó que el conflicto está en la Cámara de Diputados, “el sol azteca seguirá tendiendo la mano para que sea por esta vía como se llegue a una solución, creemos que no se le puede cobrar factura a los niños porque ellos no reformaron la ley educativa, deberían enfocar sus baterías hacia la clase política que los hizo, recomendó.
Para finalizar, y a propósito del inicio del periodo de clases, insistió en que debe ser el Gobierno quien tiene que proveer además de maestros, insumos y rehabilitación de planteles educativos para así acabar con el vicio de las mal llamadas “cuotas voluntarias”.