Machos – alfa y la «Temachina»: entendiendo el entretenimiento ideológico del Temach
Aguascalientes, Enero 30 (2024).- En los extremos ideológicos, la intolerancia y la rigidez convergen, revelando que, paradójicamente, tanto el radicalismo de derecha como el de izquierda comparten una propensión a la cerrazón y el dogmatismo.
CAPITULO I: QUÉ ES UN TEMACH
Estimado lector de esta columna, si usted es participe de la aldea digital/cámara de eco/sesgo de posturas que llamamos redes sociales y si su algoritmo entiende que le gustan las posturas radicales y sesgadas a los extremos, quizá con una buena combinación y cruce de información con su lista de reproducción en YouTube, además de la información que aporta Spotify gracias a sus reproducciones de playlist tales como “Pa´pistear en la carne asada”, “Pisteadoras y bonitas” y demás contenido de corte macho y llorador, evidentemente usted conoce al Temach por su proveedor de entretenimiento ideológico de nombre Tik-Tok , Facebook, X, Instagram o cualquier cosa. Si no es así, primeramente lo felicito y al mismo tiempo me compadezco de usted, porque será necesario que cheque lo que hace ese hombre a través de las redes sociales para que pueda entender lo que criticaremos en esta columna.
Dejando de lado el chascarrillo sobre los algoritmos que nos escuchan y conocen más que nosotros, centrémonos pues en el personaje/influencer/actor/experto-en-masculinidad/experto-en-relaciones-hombre-mujer que nos acontece. Hace tiempo que llevo observando el contenido de entretenimiento que hace este hombre en redes, sin embargo hace poco pude presenciar por mí mismo dos fotografías/videos que llamaron poderosamente mi atención, otorgándole la victoria nuevamente al algoritmo, en los cuales se observa al buen Temach haciendo cierto ritual social de reconocimiento y nombramiento con un grupo de hombres de varias edades, se observan desde jóvenes hasta adultos, el cual eran certificados de primera mano que eran “Machos-Alfa” y el pacto era cerrado con la colocación de una cadena en el cuello para portar siempre al frente y con orgullo las iniciales T.E. combinadas en un logo que simboliza al “TEMACH, EL CERTIFICADOR DE MACHOS-ALFA”, evidentemente el ritual era muy apoyado en el contexto en el que se llevaba a cabo, pero al observarlo desde afuera si genera muchas preguntas y reflexiones.
Entre las ideas que tuve al observar el contenido que me arrojo el algoritmo, me pregunte ¿Por qué un hombre necesitaría ser reconocido como un “Macho-Alfa”? ¿Hay personas dispuestas a pagar una convivencia/simposio con el Temach? ¿Qué no nos había quedado en claro ya con Carlos “El Master” Muñoz, que esas personas de internet no son más que vendedores de humo? ¿Hace cuánto puse la playlist “Pisteadoras y bonitas” para que me salgan estas cosas? Y otras más… pero vamos a centrarnos en la primera, ¿Por qué un hombre necesitaría ser reconocido como un Macho-Alfa? Para responder esta pregunta debemos entender que el contenido de entretenimiento que vende este personaje es un cierto tipo de coaching para masculinidades, pero no como los talleres de nuevas masculinidades donde se trata la aceptación y comprensión de nuevos horizontes para el concepto de ser “masculino” que se acomoda más al contexto de la época en que vivimos. El coaching que vende el Temach es más del estilo, en sus propias palabras “¡Mi compa, aquí va a aprender como “enclochar” a una morra! ¡Aquí le vamos a enseñar cómo no ser un SIMP más mi Compa! ¡Póngase en modo guerra mi compa, porque el esfuerzo le traerá morras mi compa! ¡Funen a ADIDAS mis compas! ¡Aplíquele la “temachina” a las morras mi compa y sea usted más ver**! ¡Cómprese mi curso mi compa y sea el más chin*** con las morras!
El punto central del mensaje del buen Temach se centra en la idea de que el sexo femenino de alguna forma está condicionado a la hipergamia, esto quiere decir que de forma inconsciente las mujeres son arrastradas por ciertos poderes genéticos que la llevan a buscar siempre parejas con estatus alto, que transmitan seguridad, que aporten mucho o como lo decía Erich Fromm sean lo más posible atractivos y con valor según la escala del mercado donde se ofertan las relaciones, es decir el que tenga más sex appeal, ese de forma irresistible siempre será elegido por las féminas. Por lo cual, entendiendo que solo las mujeres buscan a los hombres de alto valor, los cuales por medio de las señales inconscientes transmitan los mensajes adecuados que sean de poder, estatus, valor, exclusividad, basta convertirse en uno de esos hombres de alto valor y se tendrá acceso a todo el catálogo de féminas del país, porque como ya se dijo ellas solo buscan hombres así.
Pero no solo se trata de entender que las mujeres lo único que buscan son hombres de alto valor, sino que aquí el verdadero asunto está en convertirse en el “hombre de alto valor” y curiosamente el Temach tiene el método adecuado, práctico, explicado, corregido y aumentado para que esta tarea ardua del “perfeccionamiento humano” llegue a buen puerto, tiene el método “Modo Guerra” en el cual predica que el hombre tiene que poner en alta estima todas las actividades que le aportan valor como hombre, como un buen físico, un título, un buen trabajo, una buena casa, buenas relaciones humanas, buen intelecto, un buen negocio y toda cosa que se considera de valor en el hombre, pero para ello tiene que dedicarle el tiempo necesario y suficiente, poner todo su esfuerzo en conseguirlo y en llenar esa lista “check” por ello debe de evitar a toda costa la distracción y la pérdida de tiempo que invierte en conseguir/perseguir mujeres y enfocarse en sí mismo, olvidándose de la mujeres, de observarlas incluso en las redes sociales y de evitar a toda costa el ejercicio auto-erótico, porque eso debilita la voluntad.
CAPITULO II: QUIÉN ES EL TEMACH
Lo espero en la próxima columnaJ.
Lic. Oscar Roberto Valadez Vázquez. Filósofo, director del Café Filosófico «Estoicos – Hedonistas» en Creatoria, conductor del programa “La Taberna», fundador de «In Taberna Quando Sumus», y estudiante de Derecho.