Levanta la voz de nuevo el gremio de la Comunicación en Aguascalientes
Aguascalientes, Diciembre 21 (2017).-Empleados de la comunicación en la entidad y directores de sitios web signaron este día un manifiesto luego de conocer otro asesinato en contra de un compañero del Estado de Veracruz.
A la Opinión Pública.
Nuestro país está sumido en una guerra desde hace once años cuando el Gobierno Federal decidió tomar acciones contra el narcotráfico provocando miles de asesinatos y desapariciones en todo el territorio nacional. Una tragedia que ha quedado implícita una vez más, luego del asesinato del reportero Gumaro Pérez Aguinaldo en el estado de Veracruz.
Con ello suman decenas de periodistas asesinados en México, lo que coloca a nuestra Nación como de las más inseguras para ejercer esta profesión.
Una de las expresiones de rechazo colectivo que recientemente se han presentado fue el movimiento nacional que protagonizaron comunicadores y reporteros tras el asesinato del compañero Javier Valdez Cárdenas en Sinaloa el pasado 15 de mayo, caso que se suma al menos a otros cien más que a la fecha no han sido investigados y mucho menos resueltos por autoridades de los tres niveles de gobierno, lo que demuestra que las leyes aprobadas para la protección de periodistas en nuestro país han quedado en letra muerta.
La situación ha tocado ya puntos alarmantes, tanto así que organizaciones extranjeras como los Colegios Profesionales de Periodistas en España convocaron a más de medio centenar de personas que protestaron frente a la embajada de México en Madrid para exigir al gobierno de Peña Nieto que los arteros crímenes contra integrantes del gremio periodístico puedan resolverse y erradicarse.
En el caso del periodista policiaco Gumaro Pérez, las autoridades en Veracruz han vinculado el delito con el narcotráfico, la Fiscalía General veracruzana relaciona la violencia en contra del reportero con el crimen organizado, estrategia a la que han acudido en innumerables ocasiones autoridades encargadas de la impartición de justicia para deslindarse de la responsabilidad de generar las medidas necesarias para que la protección a los comunicadores sea una realidad.
Creemos que los riesgos para ejercer el periodismo en nuestro país cada vez son mayores y nuestra preocupación se acrecienta al saber que se han aprobado a nivel federal iniciativas como la Ley de Seguridad Interior y la llamada Ley mordaza o “antimemes” que no es otra cosa que un atentado a la libertad de expresión.
De acuerdo a la revista Gatopardo, en lo va del año han sido doce los profesionales del periodismo abatidos en México y los enlista de la siguiente manera:
Cecilio Pineda Brito fue asesinado el 2 de marzo en Ciudad Altamirano, Guerrero. Era director del diario La Voz de la Tierra Caliente y colaborador del periódico El Universal. Cubría la fuente policiaca del diario y según Proceso, unos días antes de ser asesinado el periodista publicó un video en su cuenta personal de Facebook en el que hablaba de la relación del gobierno de Héctor Astudillo Flores con el grupo delictivo “Los Tequileros”, liderado por Raybel Jacobo de Almonte. Hasta la fecha no hay acusados.
Ricardo Monlui Cabrera fue asesinado el 19 de marzo en el municipio de Yanga, en Veracruz. Era director del impreso El Político; y dueño del portal digital elpolitico.com.mx, además presidente de la Asociación de Periodistas y Reporteros Gráficos de Córdoba y la Región y fue también jefe de prensa de la Unión Nacional de Productores de Caña de Azúcar CNC. Escribía la columna “Crisol” que aparecía en El Sol de Córdoba y El diario de Zalapa, en la que trataba temas cañeros. CPJ publicó que el tema en torno a la industria azucarera y los intereses económicos en la zona han llevado a varios enfrentamientos violentos.
Hasta la fecha no hay acusados.
Miroslava Breach Velducea fue asesinada el 23 de marzo en Chihuahua. Era corresponsal del diario La Jornada, colaboraba con el periódico El Norte de Chihuahua y fue directora editorial de El Norte de Ciudad Juárez. La BBC la definió como “periodista incómoda” porque sus publicaciones continuamente hablaban sobre corrupción política, violación a derechos humanos, agresiones a comunidades indígenas y la narcoguerra.
Ya fueron identificados los presuntos asesinos, pero no han sido capturados.
Maximino Rodríguez Palacios fue asesinado el 14 de abril en La Paz, Baja California Sur. Llevaba dos años trabajando para un portal de denuncia ciudadana, noticias sobre corrupción, discriminación y abusos llamado Colectivo Pericú. Escribía la sección policial y tenía una columna titulada “Es mi opinión”.
Hasta la fecha no hay acusados.
Filiberto Álvarez Landeros fue asesinado el 29 de abril en el municipio de Tlaquiltenango, Morelos. Trabajaba para la estación de radio “La Señal”, en donde fue interceptado después de su programa que comenzaba a las ocho de la noche.
Hasta la fecha no hay acusados.
Javier Valdez Cárdenas fue asesinado el 15 de mayo en Culiacán, Sinaloa. Trabajaba como reportero del semanario local RíoDoce –del que fue fundador– y era corresponsal del periódico La Jornada. En septiembre del 2016 Valdez publicó el libro Narcoperiodismo, en el que narra historias de periodistas que han sido víctimas de la delincuencia. En una entrevista con La Jornada dijo: “No hablamos solo de narcotráfico, una de nuestras acechanzas más feroces. Hablamos también de cómo nos acecha el gobierno.”
Hasta la fecha no hay acusados.
Jonathan Rodríguez fue asesinado el 15 de mayo en Jalisco. Rodríguez era reportero del diario El Costeño, del municipio de Autlán, Jalisco. El auto en el que viajaba con su madre, Sonia Córdova –directora de información del diario– fue emboscado por cinco sujetos armados. El vehículo recibió 25 impactos de bala. Jonathan Rodríguez falleció en el lugar y su madre sobrevivió. El Costeño había recibido amenazas en días anteriores. El reportero era hijo de Héctor Rodríguez, director del medio informativo.
Salvador Adame desapareció el 18 de mayo en Michoacán. El periodista era director de Canal 6tv, en Nueva Italia, Michoacán. Su familia y colaboradores denunciaron la desaparición el 19 de mayo. El 26 de junio, la Procuraduría de Michoacán anunció el hallazgo de los restos de Adame en estado de calcinación, en Barranca del Diablo, en el municipio Gabriel Zamora, en Michoacán.
Luciano Rivera fue asesinado la madrugada del lunes 31 de julio en un bar en Playas de Rosarito, en Baja California. Rivera dirigía la revista Dictamen y era accionista del canal CNR, donde era conductor de noticieros. Rivera fue asesinado con disparos de arma de fuego.
Cándido Ríos fue el primer periodista asesinado bajo la protección del gobierno federal a través del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas. Ríos fue asesinado el 22 de agosto en el municipio Hueyapan de Ocampo, en Veracruz; el periodista entró en 2013 al programa de protección pues se sentía amenazado por el ex alcalde de dicho municipio, Gaspar Gómez Jiménez.
Edgar Esqueda fue un fotoperiodista que colaboró de forma recurrente de los portales digitales Metrópoli SLP y VoxPópuliSLP. Su desaparición fue reportada por la organización Artículo 19 el 5 de octubre. CPJ reporta que el periodista, quien cubría la nota roja local, fue “levantado” en su domicilio, por hombres armados vestidos de policías. El viernes 6 de octubre se dio a conocer que su cuerpo fue encontrado cerca del aeropuerto de San Luis Potosí.
Gumaro Pérez Aguilando fue asesinado frente a su hijo el 19 de diciembre, en Acayucan, Veracruz. Pérez Aguilando había recibido amenazas de muerte desde 2012. Un comando armado entró a asesinarlo en las instalaciones de la escuela primaria “Aguirre Cinta”.
Ante ello, los abajo firmantes exigimos al presidente Enrique Peña Nieto y a los gobernadores en cada entidad federativa a que hagan valer la Ley de Protección a Periodistas y los acuerdos internacionales que ha signado nuestro país en la misma materia. Hacemos un llamado a organizaciones que luchan por los Derechos Humanos más allá de nuestras fronteras para que dentro de sus posibilidades legales puedan convocar al gobierno federal mexicano para que garantice la seguridad de quienes ejercen el periodismo en nuestro país.
En lo particular, los reporteros y comunicadores en Aguascalientes solicitamos respetuosamente al gobernador Martín Orozco Sandoval, llevar el sentir de este manifiesto hasta la CONAGO, organismo del que forma parte y en el cual fue designado como integrante de la subcomisión de defensa de periodistas en el país.
Firman:
Ángel Antonio Dávalos Escalona / reportero y conductor de Radio Grupo y OchoTV.
Carlos Romo, Alfonso Morales Castorena/ Aguzados.com
Itzel Acero y Claudia Castro / El Diario de Aguascalientes.
Lizeth López Velarde Ramírez, María Miranda Franco, Alan Palafox Porter/ Metropolitano Aguascalientes.
Laura Elena Rivera Manzanares
Gabriela Jiménez Castañeda.
Diego Armando Vázquez Albor y Luis Alberto González/ Revista Ahí para el Mundo.
Francisco Javier Jiménez Rodríguez.
Erick Alejandro Ramírez de la Cruz/ Ultra.
Rubí Mejía y Oscar Manzano.
Jaqueline Hernández / El Reportero.
Mario Luis Ramos Rocha
Gloribel Amezola Tavares.
Isabel Martínez Haro / Entre Mheridianos.
Mónica Cerbón.
Benny Díaz / Noticiags.com
José Luis Bonilla Barrón.
Lizeth López Carrillo / Testigourbano
Cynthia Andrade de Paul
Gilberto Sánchez Triana / alchileguascalientes.com
Matilde Arteaga Duarte.
Jesús Hernández.
Carlos Gutiérrez / Noticen
Claudio Jairo Bañuelos / El Clarinete.
Alberto Viveros Lozano/ Termápolis
Matilde Arteaga Duarte
Edilberto Aldán, Tania Magallanes, Adriana García Campos/ La Jornada Aguascalientes