La democracia que evoluciona: @ahumadaroberto
“Una gran democracia debe progresar o pronto dejara de ser o grande o democracia”: Rooselvelt
La democracia se puede definir como la voluntad de la mayoría para la elección correspondiente dentro de un sistema político y organizacional.
Lejos de lo mencionado por Platón sobre su concepto sobre la timocracia y de cómo se traslada al pragmatismo de la democracia, se logra vislumbrar un sistema que impera en la mayoría de las naciones, es decir existen aproximadamente 160 países en el mundo en donde la democracia es la base de un sistema el cual de manera paralela tiene consecuciones directas con el neoliberalismo y la circunstancia económica que impera.
México a pesar de tener una democracia desde hace ya varias décadas, primeramente se constituyó como una democracia en donde por más de 70 años un solo partido político era el que ganaba la mayoría de las elecciones en los estados y del mismo modo la elección presidencial, la hegemonía del PRI permaneció por muchos años, y posteriormente el PAN en la década de los 90s después del triunfo de Ruffo Appel en Baja California en el año de 1989 y con la inercia de la campaña de Clouthier comenzó a ganar diversas elecciones de estado para en el 2000 ganar la presidencia de la república y refrendar el triunfo en el 2006, lo cual hacía que el sistema democrático tuviera dos partidos políticos con elevadas posibilidades de gobernar a nivel país, de manera paralela a finales de los 90s, se constituye el PRD y en la siguiente década partidos políticos los cuales en su mayoría son fundados por personas pertenecientes a los primer tres partidos mencionados.
Eso genera una gama más amplia para que la sociedad pueda decir por quien votar, en los últimos años se han hecho populares las candidaturas independientes gracias a la reforma política, es decir del sistema implantado ya existen considerables evoluciones, sin embargo y de manera muy realista, en la sociedad sigue existiendo un sentimiento de insatisfacción el cual es derivado de un fenómeno en el cual siempre la sociedad tiene la creencia de que un político, independientemente quien sea, va cambiar todo.
Hay claros ejemplos como el Diputado independiente de Jalisco, Pedro Kumamoto y el del actual Gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez mejor conocido como el “BRONCO”, que con campañas novedosas y un marketing político excepcional, lograron obtener un triunfo que es histórico para esta democracia, sin embargo en el caso de Jaime Rodríguez su nivel de aceptación es muy similar al de cualquier Gobernador, lo cual refiere que su consolidación no ha sido tan grandiosa como su propuesta de campaña.
Este año es el último antecedente antes de la elección presidencial 2018, independientemente de lo que suceda en las elecciones de este año, hay datos muy claros, por citar algunos, las tres ciudades con mayor concentración poblacional, Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara, son ciudades que no son gobernadas ni por el PRI ni por el PAN, las encuestas refieren al candidato López Obrador con una gran posibilidad de ganar la elección, el PRI cuenta con un desgaste político severo y con un presidente con un nivel de aceptación muy bajo, el PAN tiene grandes posibilidades en la medida en la que no exista una división interna y en un contexto paralelo se registraran muchos partidos nuevos.
El escenario es más complejo aun, sin embargo serían necesarias más páginas y más elecciones para tener elementos multifactoriales para el análisis, lo que de manera personal es irrefutable es que para que la democracia evolucione es necesario el criterio de una sociedad preparada y no manipulada, solo es la virtud y el apego al conocimiento los pueden ser garantía para que un sistema evolucione y progrese, de lo contrario no importara el partido político ni el candidato, puesto que los resultados serían los mismos.
“NO HAY EN LA EVOLUCION CULTURAL UN PUNTO ANTES DEL CUAL NO SE PRODUZCAN LUCHAS”.