Flemático para la Diócesis el trabajo de la LXI legislatura
Aguascalientes, Noviembre 11 (2013).- Para el vicario de la Diócesis Local, Raúl Sosas Palos, el desempeño de la legislatura saliente fue indiferente, el sacerdote hoy en el tradicional encuentro de medios con la representación de la iglesia católica, a la que no asistió el Obispo, José María de la Torre Martín, se le preguntó sobre la calificación que daba la iglesia romana al trabajo de los diputados de la LXI legislatura, respondiendo que “ni bueno ni malo”.
“Valoramos y agradecemos lo que los legisladores han hecho para bien de la comunidad”, dijo a secas el religioso quien deja ver que desde la óptica eclesiástica fue indiferente, que paso de noche, “los invitamos para que aquellos aspectos que han quedado pendientes o aquellas leyes que están todavía en estudio, en su momento se promulguen para bien de la sociedad”, abundó el declarante.
Sosa Palos, sacó a relucir el polémico tema del Derecho a la Vida, una iniciativa presentada por el Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (GPPRI), en la persona de José Luis Alférez, la cual al final del día y por quererla subir al pleno en época electoral, se guardó para no salir ya jamás, a pesar de estar dictaminada, lo cual enfureció al prelado quien lanzó una serie de adjetivos a los parlamentarios los cuales habrá que decir, no se quedaron callados.
“Tuvo luz y sombra”, agregó el vicario quien se manifestó a favor de que la sociedad haga un análisis puntual y definido de lo que observó de sus representantes populares a lo largo de los tres años de ejercicio constitucional en tanto que a los entrantes les dijo, “pedimos a dios que sea el que les diga esos esfuerzos y afanes que deberán de llevar a cabo durante los próximos tres años”.
La Diócesis vía el jerarca De la Torre Martín, tuvo varios desencuentros con los asambleístas producto de la iniciativa toda vez que mientras el prelado consideraba urgente la necesidad de blindar el derecho a la vida desde la concepción, a los parlantes no les quedaba claro si tendría que ser desde la concepción o fecundación, ello provocó que se retrasara la votación y como consecuencia hizo enojar a Mon Señor, quien los tachó de lo peor.
Derivado de lo polémico y escabroso que se estaba presentando el caso, el cual saco a la gente (creyente) a las calles a protestar pacíficamente, a marchar, hacer ayunos y varios reclamos enérgicos desde las tradicionales conferencias de prensa del Obispo, los asambleístas determinaron esperar a que se calmaran los ánimos y la presión de la religión católica, lo cual hizo que José María arremetiera con todo.
Otro de los que presionaron al Congreso fue el Consejo de Laicos, “si no se tiene a ser, no hay posibilidad de tener ningún derecho, derecho a la vida sin adjetivos, derecho a la vida sin menoscabo de los derechos de la mujer y sin el sacrificio de quien menos puede defenderse, son los pilares que debería tener la reforma”, señaló esta agrupación en su momento la cual acudió al Congreso en busca de los legisladores para hacerle llegar sus puntos de vista sobre la discusión.
La Asociación “Católicas por el derecho a decidir A.C”. Denunció ante la Secretaría de Gobernación al Obispo de la diócesis local, José María de la Torre Martín, por su intromisión en la vida política del H. Congreso del Estado, misma que nunca se supo sobre el final de la queja.
En tanto que los aludidos respondieron a través de la priista, Citlalli Rodríguez quien esto mando decir al acusador, “lamentó que cuando un líder social o religioso agrede a esta Soberanía, al mismo tiempo lo hace a nuestra democracia”; y recordó que la historia del país registra una serie de hechos que durante más de 150 años se ha tratado de marcar claramente el mundo terrenal con el del más allá, y no puede caerse en luchas como la Guerra Cristera, la cual fue un “conflicto bañado de sangre”.