El Instituto de Transparencia es una vergüenza
Aguascalientes, Noviembre 22 (2016).-El Instituto de Transparencia de Aguascalientes (ITEA) reprobó, con una calificación de 49.6, el Índice Nacional de los Órganos Garantes del Derecho de Acceso a la Información (INOGDAI), elaborado por Article 19 y México Infórmate.
A pesar de que el sueldo anual de los comisionados aumentó 12.3 por ciento entre 2010 y 2013 y de que durante ese tiempo ejerció un presupuesto per cápita superior a la media nacional, el ITEA fue el séptimo instituto de transparencia peor evaluado del país y se colocó en la posición 25 de las 32 entidades de México.
El sueldo anual de los comisionados pasó de dos millones 272,231.68 pesos en 2010 a dos millones 551,241.52 en 2013, de acuerdo con los datos del portal de transparencia. Entre 2010 y 2012, indica el estudio, el presupuesto per cápita del Instituto creció de 7.95 a 8.08 pesos.
Aun así, María Cristina Díaz León, Ángel Hernández Arias y María Elena los comisionados fueron ratificados en el cargo en dos ocasiones durante el sexenio, vía reformas legislativas. La primera, en 2010, cuando se extendió su periodo por dos años, para concluir en diciembre de 2016; la segunda, con la reforma publicada en noviembre pasado.
El informe destaca la inexistencia de información sobre la preparación académica de los comisionados de Aguascalientes. Es decir, aunque sus currículums fueron uno de los requisitos para ser designados comisionados, esos documentos no estaban disponibles en la página web del instituto en el periodo analizado.
La peor calificación del ITEA fue en el rubro de promoción del derecho de acceso a la información, donde obtuvo 33.3 puntos, de los 100 posibles.
“El número de capacitaciones dirigidas a los sujetos obligados en 2012 y 2013 se situó por debajo de la media nacional. El órgano garante coordina programas educativos pero no implementó proyectos para promover el derecho de acceso a la información entre grupos en situación de vulnerabilidad”, señala el informe.
Article 19 y México Infórmate detectaron que “el Instituto declara la inexistencia de información en buena parte de la información solicitada” como mala práctica. No documentó ninguna buena práctica.
Además, el ITEA no emitió criterios de interpretación de la Ley de Transparencia en 2011 y 2012; no contaba con procedimientos para dar seguimiento a la calidad de la información entregada por los sujetos obligados y “la proporción de revocaciones sobre el número de recursos de revisión interpuestos en 2011 y 2012 fue superior a la media nacional”.
En el periodo de la evaluación -y hasta la fecha- no se han practicado auditorías al instituto; las sesiones, aunque son públicas, no son transmitidas en vivo ni hay una grabación que se pueda consultar después de que se lleven a cabo, y el Congreso no ha notificado de revisiones al informe de labores que los comisionados presentan cada año.
Información: nwnoticias.com