Distritos Electorales equilibrados / Ruelas
Aguascalientes, Mayo 03 (2022).- Los últimos 31 años han sido para nuestro país un estrujante ensayo de vida compartida satisfactorio. Hemos preferido el espacio público, en su cambio de paradigma, pasó de parques a pantallas, es decir, lo virtual se acogió a la realidad de espacio público. Con mesura el colectivo ha ido tomado parte en la política. Con los nuevos signos del espacio público, involucrarse en la política no tiene como consecuente renunciar a los intereses individuales, por el contrario, los confronta, los desafía, encuentra el equilibrio.
Un nuevo entramado de virtudes cívicas demanda una arquitectura didáctica para educación electoral. El cuestionamiento es si el tránsito de nuestros deseos es coherente con los valores y principios de la democracia, autonomía, dignidad, solidaridad, cordialidad. El diálogo crea una atmosfera en la que escuchar es propedéutico de hablar, sustento de la deliberación para formar opiniones sobre la base del diálogo. Las virtudes democráticas sobre pasan los valores para que la democracia no sea simplemente formal. La justicia demanda el imperativo de la neutralidad como virtud elegida, pero no el sometimiento del vicio, impedimento de pensar con claridad y equidad, ponernos en el lugar del otro, hacer nuestras sus razones para revisarlas, valorarlas, comprenderlas o insistir en las nuestras, si la razón nos abraza.
La virtud nos hace universales, nos crea un pensamiento apto para deliberar y pensar. La virtud es voluntad de vivir en comunidad, es la verdad con la que se muestran los compromisos, es la existencia por donde podemos transitar a la vida compartida, que se debate en la pluralidad, que trabaja en consensos, que en la diversidad construye opiniones para empoderar las decisiones tomadas por gobernantes. A la democracia se le defiende con actuaciones democráticas no con discursos que basurean todo disenso. La democracia demanda prácticas en la otredad para erigir comunidades justas. Solo ejercitando las virtudes se destruyen los hábitos indeseables como la corrupción.
La vida pública nos concierne a todas y todos, la política no es una franquicia para destruir la vida privada. Las mayorías han empobrecido la calidad democrática, pueblo no es sinónimo de mayoría, es preciso revisar, actualizare interpretar adecuadamente la idea de mayorías. En esa virtud el INE en concordancia con el mandato de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos realiza la evaluación de los crecimientos poblacionales en las demarcaciones electorales para dar equilibrio a la representación política, para crearles un dialogo entre pares que logre acuerdos en el bien de la Patria. Verdad, exigencia y diálogo es la propuesta actual del INE. La distritación logra una acción comunicativa que permita a la ciudadanía forjarse una voluntad común en cuestiones básicas de justicia al amparo de la imparcialidad, del derecho, a través de un diálogo coherente y lúcido con exigencia de competencias y responsabilidades de la representación política en demarcaciones prudentes y equilibradas…
Las demarcaciones electorales es un teme esencial en la democracia, se trata de la dignidad jurídica y política que impulsa sistema político justificado. Las personas hacen el cuerpo electoral cuando cumplen los extremos que la ley señala para tener en honroso título de ciudadanía, es la necesidad de la “polis” en la que reflexionó el estagirita, se trata de una capacidad y necesidad de organización de la base de la representatividad política, una demarcación geográfica que hospeda interrelaciones entre personas en su atmosfera de pluralidad y diversidad.
Demarcación política es sustento democrático y democracia conlleva circunscripción, constituida ésta por una célula básica de la organización electoral: la sección electoral, este espacio de las interlocuciones válidas y esenciales es también el ámbito territorial de la dignidad que impulsa la igualdad ante la ley.
El territorio como distritación es garante de la inclusión social, defensa ambiental, desarrollo y crecimiento económico; lugar donde se aprecia la voluntad mediante la transformación de boletas en votos. Valorar la diversidad cultural, étnica, el medio ambiente es parte del patrimonio de la sociedad en su conjunto. La distritación descentraliza y en un polígono plasma las responsabilidades institucionales de la democracia. Los distritos son el espacio de la gobernanza del siglo XXI, es el reto de las demarcaciones que empoderan la articulación y convivencia en la vida compartida, sobresalen interacciones y reciprocidades. Los 300 distritos que componen el país además de ser un desafío son un espacio común entre lo local y lo nacional, su sustento:
Artículo 53 de nuestra Carta Magna, dice: “La demarcación territorial de los 300 distritos electorales uninominales será la que resulte de dividir la población total del país entre los distritos señalados. La distribución de los distritos electorales uninominales entre las entidades federativas se hará teniendo en cuenta el último censo general de población, sin que en ningún caso la representación de una entidad federativa pueda ser menor de dos diputados o diputadas de mayoría.” …