Asesinatos en masa/Comentarios de un Ciudadano
Los últimos acontecimientos a nivel mundial nos ponen en un plano verdaderamente preocupante, pues vemos como en los Estados Unidos comienzan a darse una serie de masacres originadas por extremistas en nombre de sus creencias. Preocupado el presidente Barak Obama propuso una ley para controlar en el país, la venta de armas, y que se investigue más a quienes las adquieren; recordemos que ese país es el productor número uno de armas en el mundo, pero el congreso estadounidense rechazó la moción del presidente por atentar contra «las libertades» a poseer armas sin límite, en sus domicilios, incluyendo las armas de asalto. Pero no solo eso, también las autoridades judiciales, en nombre de la guerra al narcotráfico, implementaron programas mediante los cuales enviaron miles de armas de todo tipo, las cuales se vendieron a los criminales; y según ellos, a través de las armas, se detectarían los lugares de operación de las bandas y se podrían detener.
Esto resultó falso, y lo que hicieron fue enseñarlos como conseguirlas e introducirlas a México, con el consiguiente baño de sangre que a la fecha sigue padeciendo nuestra patria, pues los asesinatos y enfrentamientos cada día son más crueles, y ya hemos visto que no se tocan el corazón con civiles, con armas o no; y los enfrentamientos con las autoridades cada día son más fuertes, pues están equipados con armas de alto poder, algunas que sólo el Ejército Mexicano tiene.
Pero esta situación no ha tenido eco en los Estados Unidos para ver la forma de colaborar con las autoridades mexicanas, para buscar la manera de impedir el contrabando de armas que es el directo causante de los hechos antes mencionados y así evitar la muerte de miles de mexicanos, como ha sucedido en los últimos años , hechos de verdad terribles que han mutilado miles de hogares y dejado una estela de desesperación y luto en los hogares mexicanos.
Ahora los asesinatos masivos que se llevan a cabo en los Estados Unidos, que no se comparan en cantidad con los que suceden en nuestro país, han llevado a las autoridades a buscar controlar más a los posibles sospechosos dentro del país y a castigar al que ahora señalan como el culpable de estos hechos, o sea al Estado Islámico, y atacar en los países de medio oriente a estos terroristas, pero todo desde el aire, pues sus invasiones con soldados pie a tierra, les han costado miles de bajas, y al final han tenido que salir de esos territorios con una derrota militar y moral, y exhibidos ante el mundo como mentirosos, por aquello de las «armas de destrucción masiva» de Sadam Hussein, y los nidos de terroristas de la Libia de Kadafi, pues ahora están por todo el mundo. El asunto es que estos casos de ataques aéreos, de todos los países de occidente Europeos y Estados Unidos, y ahora Arabia Saudita y los Emiratos Árabes, están haciendo daño en ciudades completas, que están dominadas por el «enemigo», pero en las cuales hay civiles, incluyendo niños, mujeres y ancianos, y las bombas no diferencian entre los que son terroristas y los que no lo son. Y a esto no ha habido nadie que levante la voz pidiendo que se respeten esas vidas humanas.
Esa es la paradoja, pues las masacres en los Estados Unidos no son comparables con las que suceden en México y en los países que están atacando, ¿y porque no decirlo? ¡Masacrando!
Debemos recordar que la violencia genera violencia, como lo decía San Juan Pablo II, y estos actos de extrema violencia amenazan con extenderse a otras partes del mundo; al grado que a nuestro país, que no ha intervenido en ese conflicto, los extremistas, colocan nuestra bandera, como parte de los países que los están atacando, en las redes sociales, y que según ellos serán blancos de su venganza.
Con esto nos damos cuenta que lo que nosotros no hagamos por buscar la paz y tranquilidad en nuestro país, nadie lo hará, pues cada país se encuentra inmerso en su propia red de violencia, y lo menos que harían sería involucrarse en otro que les pueda llevar a una contaminación de la violencia y la barbarie.
Los asesinatos de seres humanos son graves, sucedan en el país que sea. Debemos de tener esa visión, como lo que somos: Un pueblo solidario y sensible.
Por: Felipe González González