Los infiernos del IMSS (2) / Vale al Paraíso
Ayer publiqué en este espacio la sentida queja de una derechohabiente por los dantescos servicios médicos prestados por el Instituto Mexicano del (in)Seguro Social en Aguascalientes, que en nada se comparan con el trato fifi dispensado a 500 diputados federales, al expedirles la Secretaría de Relaciones Exteriores su pasaporte gratuito en la mismísima Cámara —gobernada de manera absoluta por Morena—, quien solicitó a la dependencia esta canonjía.
Los señoritingos, diría el presidente electo López Obrador, evitaron el engorroso trámite y la sufrida fila, que para eso sirve la Cuarta Transformación en el Congreso de la Unión, dispuesta a reiterar la existencia de ciudadanos VIP y de ciudadanos jodidos, carente de dinero para acceder a la cara medicina privada.
El chisme que corre entre los burócratas del (in)Seguro Social en Aguascalientes, es “el arribo a la delegación del doctor Netzahualcóyotl Álvarez Cardona”, ex líder sindical y ex diputado local por el PRI, quien sustituiría al inútil Diego Martínez Parra.
Porque alguien debe de escribirlo: Durante seis años se batió como los grandes. Hizo de la defensa a la patria su cotidiana tarea. Puso muy en alto el nombre de Aguascalientes Jamás escatimó esfuerzo alguno para legislar por el bienestar de la población. Hizo el bien sin mirar a quien. Siempre con extrema discreción, por supuesto.
El loable proceder de este Popeye de la política nacional tiene su bien ganada recompensa. A escasas semanas de haber concluido el encargo de senador de la República, Fernando Herrera Ávila, influyente militante del PAN, regresa por la puerta de honor para recibir los sinceros abrazos de su comunidad, representada en el municipio de Aguascalientes, por las/los regidores y las/los síndicos del Cabildo presidido por María Teresa Jiménez Esquivel.
En la décima octava sesión ordinaria, celebrada el reciente martes 9, los tribunos municipales aprobaron el dictamen presentado por la Comisión de Cultura, para homenajear a diversos personajes “distinguidos” y “distinguidas” en el marco del aniversario número 443 de la fundación de la Villa de Nuestra Señora de la Asunción de las Aguas Calientes.
De acuerdo al Boletín Informativo 993, emitido por la Secretaría de Comunicación Social, “en la categoría de Ciudadano Distinguido, recibirá el reconocimiento Fernando Herrera Ávila, contador público y abogado, es especialista en Economía y Gobierno e Imagen Pública. Ha sido regidor, diputado local, secretario de Desarrollo Social Estatal, diputado federal, donde logró la creación del Fideicomiso para el Rescate de los Ahorradores y la Ley de Sociedades Cooperativas; fue también Senador de la República”.
Al dar a conocer el resultado de la votación por cédula, correspondiente a esta propuesta, Jaime Gerardo Beltrán Martínez, secretario del Ayuntamiento, informó que 16 de los 17 integrantes presentes aprobaron la proposición de la Comisión de Cultura; del sufragio que llevó la contraria, el funcionario omitió si fue en contra de Herrera Ávila, a favor de otra persona o anulado, aunque ese detallito en nada desdora la posibilidad de que el resultado sea considerado moralmente unánime, al fin, uno no es ninguno.
El gesto, políticamente correcto, demuestra que la República Amorosa es una realidad, tan tangible como medible en Aguascalientes, al votar los regidores de oposición a favor del emblemático ex legislador del PAN, como fue el caso de Netzahualcóyotl Ventura Anaya, Hazel Montejano García y Miguel Romo Reynoso, del PRI; Mauricio González López y Karla Cassio Madrazo, Independientes; y Jennifer Kristel Parra Salas, de Morena (y nieta predilecta del presidente electo López Obrador), que se despojaron de camisas y blusas partidistas para sumarse alegremente al jubileo por la Fhe.
Las multicolores simpatías partidistas abren la posibilidad de que en la elección para gobernador 2021-2022, Herrera Ávila pudiera ser el popular candidato de la imbatible coalición formada por el PAN, Morena, PRI, PRD e Independientes, para darles chicharrón al Panal, PT y los bisoños partidos locales.
Pero por lo pronto, como dijo ya saben quién: amor y paz.
Coda: El PRI le dio la lectura correcta a la debacle del domingo 1 de julio. Ya iniciaron las tareas de la alentadora reinvención. Soplan juveniles tiempos.
Frescos. Esperanzadores. Aromáticos. Llenos de vitalidad. Esa es la interpretación que se le dio al nombramiento de Roberto Padilla Márquez, como delegado general del Comité Ejecutivo Nacional del PRI en el estado de Durango.
Desde hace tres décadas el susodicho viene siendo el alter ego de Lorena Martínez y el principal operador de las dos derrotas consecutivas de la política nacida en Tabasco, Zac., para gobernadora (2016) y para senadora (2018).
Pero además, cuando la abogada se desempeñó como delegada general del PRI en Veracruz, le acompañó en calidad de subdelegado general. Los resultados fueron desastrosos para ambos. En aquellas elecciones municipales de 2017, el tricolor perdió 58 ayuntamientos. El PAN y Morena ni siquiera les dejaron un charalito de Boca del Río en las mesas de votación.
En el comunicado emitido por el CEN del PRI, el pasado viernes 5, se informó que Padilla Márquez fue “diputado federal”: falso, jamás a sido candidato en alguna elección federal, afortunadamente para el partido fundado por Calles.
La fotografía publicada en Página 24 es más que elocuente, mire usted:
marigra1954@gmail.com