Atiende ISSEA en 6 meses a más de mil personas con adicciones
Aguascalientes, Julio 26 (2017).-El Instituto de Servicios de Salud del Estado de Aguascalientes (ISSEA), a través del Centro de Atención Primaria en Adicciones (CAPA), atendió en el primer semestre del 2017 a mil 160 personas, de las cuales, 437 pertenecen al grupo de edad de 12 a 17 años, informó el director del Área de Salud Mental, Roberto Anaya Rodríguez.
Destacó que a través de este centro se brinda atención integral a niños, adolescentes y adultos con problemas de adicciones; este servicio, subrayó, se ofrece de manera gratuita a la sociedad en general.
Anaya Rodríguez señaló que el objetivo del CAPA es evitar el consumo de drogas a través de la promoción de acciones tempranas y oportunas en las escuelas, en grupos organizados de la sociedad y en la comunidad en general.
Detalló que en el estado existen cuatro centros que se ubican en los municipios de Aguascalientes, Jesús María, Rincón de Romos y Calvillo, los cuales además de dar servicio en el lugar, realizan una labor itinerante en planteles educativos y algunos otros espacios comunitarios.
Por otro lado, explicó que el alcohol es la droga que más se consume, principalmente entre los adolescentes; “Las relaciones de amistad constituyen el factor de riesgo más importante, a decir de los propios consumidores; mientras que la incidencia por género prevalece entre los hombres, con un ligero aumento entre las mujeres”, apuntó el funcionario estatal.
Comentó que con base en estos indicadores, se observa que la población joven y en edad productiva, presenta algún problema de adicciones, por lo que hizo un llamado a los padres de familia para que tengan un mayor cuidado y atención sobre sus hijos.
Detalló que a través de las unidades de atención, se ofrece a la población un modelo de detección oportuna para las adicciones, que contempla desde la prevención del consumo de sustancias psicoactivas, hasta el tratamiento ambulatorio.
Finalmente dijo que este modelo da prioridad a la detección temprana de personas con mayor vulnerabilidad y riesgo, como son los adolescentes, así como a usuario experimentales, abusadores y con dependencia para evitar la progresión a estado críticos.
(Boletín)