Comentarios de un Ciudadano: De recortes y finanzas

Esta semana el secretario de Hacienda Luis Videgaray, y el presidente del Banco de México, Agustín Carstens, anunciaron que se recortaría el presupuesto federal en $132,300 millones, lo que representa el 0.7% del presupuesto aprobado por el Congreso de la Unión. Según la información que dieron, $100,000 millones de pesos serán reducidos a PEMEX, y su director, Juan Antonio González Anaya, presentará a su consejo, un plan de esta reducción. Esto me parece un tanto utópico, pues hace apenas 20 días que el mismo secretario de Hacienda anunció que se estaba apoyando a la paraestatal con $50,000 millones de pesos, y ahora nos dice que le quitarán la cantidad anunciada.

Todo esto nos lleva a analizar lo siguiente: Si el presupuesto de PEMEX, en 2015, fue de $532,569 millones de pesos, y este año se le autorizaron $547,560 millones de pesos, o sea que se le dio un 3% más, de un año a otro, y ahora, con este anuncio le están quitando el 19%, y nos dicen que no tocarán a los trabajadores. Ya, en una entrega anterior, habíamos comentado que la empresa debe más que los activos que tiene.

Por otro lado nos dicen que no habrá nuevos impuestos, ni tampoco se contratará más deuda. ¿Pero cómo es posible que digan eso, si el aumento de la deuda creció de 2014 a 2015 un 15.95%? O sea que debemos ¡Un billón 187,400 millones de pesos más!, Porque solo del déficit del presupuesto, del año pasado, fueron $748,100 millones de pesos, y el resto $439,900 se deben a causa de la devaluación del peso durante ese año. De acuerdo a los expertos, ni siquiera durante la crisis del 2008 aumentó la deuda de esa manera. Estos tres años han sido en los que México se ha endeudado de manera más fuerte; solo les puedo decir que la deuda del país pasó de $7.42 billones de pesos a $8.63 billones de pesos. Eso es lo que debemos los mexicanos. Y a esto agreguen que a causa de los desajustes de las fianzas nacionales, y a que el gasto público se ha dado sin medida, el riesgo país ha estado aumentando, y ahora pagamos intereses más alto que en el pasado. Tomemos en cuenta que el 31% se debe en dólares.

Ahora debemos tomar en cuenta de que en 45 días de este año el peso se ha devaluado en un 8.1%, con lo cual la deuda sube en esa proporción; y con el anuncio del Banco de México de que subirá la base de la tasa de interés, de 3.25% a 3.75%, la deuda interna en pesos subirá en esa proporción. Uno de los problemas graves es que PEMEX se recorta en 100,000 millones de pesos, la Comisión Federal de Electricidad en 2500 millones de pesos, el resto, 30,000 millones de peso aproximadamente, al gasto del gobierno federal, del que dicen que el 60% será del gasto corriente y el 40% de infraestructura. Ya el jueves el Secretario de Comunicaciones y Transportes, dijo que será suspendida la construcción 20 carreteras. Así mismo debemos de considerar los $50,000 millones que PEMEX les debe a sus proveedores, lo cual provocará, a no pocas empresas, su quiebra. Pero hay algo que nos parece increíble, en medio de esta crisis y de la toma de medidas emergentes, tanto el Poder Legislativo como el Judicial ven los toros desde la barrera, como si vivieran en otro país, y no han dicho ellos en que recortarán sus gastos para ayudar a salir lo mejor librados de este problema, que por momentos se está agravando. Esta semana, el Órgano Superior de Fiscalización del país reportó que en 2014 encontró $63,000 millones de pesos, de las cuentas públicas que deberán ser aclarados o restituidos, y que tanto el Poder Legislativo como el Judicial, son de los más opacos en sus cuentas, y que les impiden que los auditen. En ambos poderes los niveles superiores son los que ganan más que el mismo presidente de la república, y los gastos discrecionales importan miles de millones de pesos.

Forzosamente estos recortes, aunado al que ya se había dado el año pasado, y a que la deuda ya está en niveles muy peligrosos, se darán despidos masivos en varias dependencias, y se provocará una escases de liquidez en el mercado, que afectará de manera muy importante, en los negocios de todos tamaños; los intereses subirán más que lo que subió oficialmente el Banco de México. Hoy se deberá tener mucho cuidado en el manejo de las tarjetas de crédito, pues su interés será de los más altos. A pesar de todo esto, el discurso de las autoridades es que vamos bien, y los estados han subido sus deudas a $535,000 millones de pesos, aún cuando habían dicho que bajarían sus compromisos. ¿Y qué decir los municipios ahora con el recorte de las participaciones federales? Muy difícilmente van a poder dar a la ciudadanía los servicios a los que están obligados.

Es una pena que lo qué habíamos comentado, que podría venir, se esté dando. Hoy no nos queda más que trabajar y disciplinar nuestras finanzas personales para aguantar lo que viene.