Lecturas 2013; La cosecha
Para la Señora Marcela Pacheco de Ledesma, enamorada de los libros.
Al abrir un libro brotan de sus páginas una alegoría de racimos de uva, imágenes, ideas, pensamientos, narrativas… cuyos trazos son frases, párrafos y capítulos, desde luego, si se lee. Los libros son cosecha de una buena añada del vino de la cultura; en sus taninos se almacenan los secretos de la lectura. Los olores vinícolas convocan a una marcha silenciosa de la asamblea de un libro. El carácter etílico de ese buen vino arenga, hipnotiza, argumenta, convence, pone dudas, bosqueja la ruta de la ignorancia a la incertidumbre razonada. La producción 2013 está por salir. La biblioteca de la cultura, individual y colectiva, tendrá en sus estanterías la generosidad de esos benditos viñedos.
Vivimos tiempos tramposos, algunas estanterías tendrán cosechas apócrifas, clones, malas, uvas-narrativas sobre la autoestima, el éxito en tres lecciones, cómo hacer dinero sin trabajar, el “abc” para ser político sin talentos… las estanterías del “tecolotito-del-hombre-más rico-del-mundo” los pondrá en venta. Pese a todo, las uvas del honor de la tipografía se impondrán, en razón que, siguiendo con la metáfora del vino, para elaborarbuenos vinos de la lectura es esencial el suelo y el clima; estas dos consideraciones son trabajo e intelecto, como las buenas uvas, se recogen en el momento óptimo de maduración, lo cual exige un cuidadoso proceso de vinificación del mundo simbólico.
La vendimia es el primer paso, recoge las uvas de las reflexionesen sendos racimos que penden de la zona neuronal y condiciones de efectos electromagnéticos de habilidades culturales y de especialización, como uvas cuyo grado de azúcar logra la buena destilación. Los autores de los libros hacen las selecciones de uvas, en párrafos, predicados, enunciados, frases, oraciones; pero estarán solo aquellas uvas maduras que no se hayan dañado por la manipulación.
Los autores, personajes de alta consideración y honor,llevan sus ideas hacia el “lagar” (recipiente donde se pisa la uva para obtener el mosto) es el laboratorio de lógica y gramática, se trata que las ideas y sus racimos no se estropeen o inicien fermentación prematura. Es en esa reflexión crítica en dónde se determina las condiciones argumentativas yconectivas, como si revisara azúcares y ácidos.
En la “estrujadora” es donde la imaginación creadora se presiona, como el grano de la uva, lo suficiente para que este se rompa yhaga brotar las palabras claves sin que contaminen el mosto de la redacción,ni alteren el contenido y calidad de la propuesta. Esa pasta gnoseológica es llevada a la “prensa”, el creador de textos hace hasta lo imposible para que no sea dañado “el cuerpo de Cristo” que encarna las ideas. Esta parte del proceso y sus contenidos seguirá distintos procesos según el tipo de literatura a elaborar.
De manera distinta al carácter instintivo del lenguaje, la lectura y la escritura requieren una instrucción formal, ésta es la bodega del excelente vino de la lectura.Leer es para la mente como la preparación del vino, desencadenamiento de procesos complejos y proveídos. La lectura está omnipresente en la sociedad, a pesar de la híper-realidad, de la pornografía de la información, la comunicación ruidosa, las imágenes indiscriminadas…, el hábito de la lectura, excelente uva, que agiliza las actividades humanas, que entre otras, moviliza y ejercita tantas variedades de memoria como lecturas se hagan.
Leer precipita la acción de la memoria verbal y visual, posibilita varias operaciones complicadas de codificación ortográfica, semántica, fonológica. Lo que se lee se escanea. El consecuente de leer hace sensible la ortografía, la posición de las letras en las palabras. No es lo mismo “sol” que “los”, ni “cajón” que “cagón”. Leer escarburante de neuronas, una actividad que nos hace ricos culturalmente hablando, en todas sus expresiones.
El vino de las letras en sus estatus dehabilidad y costumbre fortalece la imaginación y la concentración, la creación y la arquitectura del pensamiento, sin duda, trasciende el mero hecho de consumir símbolos, produce mundos alternativos. La lectura nos permite hacerdócil el tiempo y el espacio, inteligible el ser y el ente, la abstracción y el arte… Permiteel buen tránsito de haberes entre generaciones, culturas, escuelas, hace historia y futuro, borda el presente, al propio tiempo que hilvana esas formas diferenciadas del tiempo.
Al leer el vino de los textos se precipita la más excelsa pantalla en 360 grados, llena de contenidos el mundo de la vida en una sinfonía cuyas partichelas articulan un todo estético que comunica y unifica nuestras facultades mentales, innegable, presentes en el concierto.Leer es una actividad estimulada por las cosechas del vino mejor escogido, gracias a sus uvas que permiten la imaginación inagotable de la vida y sus aliados.
La sobresaliente bodega de estos vinos-encuadernados excelentes, acá en esta tierra generosa con un pueblo laborioso es: Librería Universal. ¡Sin duda!
Por: Ignacio Ruelas Olvera