Silis tuvo su primer encuentro con el campo bravo

Noviembre (2013).- El marco no podía ser mejor, el rancho El Correo, en el municipio jalisciense de Encarnación de Díaz, donde se ubica la ganadería de reses bravas Rosas Viejas, casa de la divisa en verde, blanco y oro, propiedad de don Fernando Topete Ceballos, quien acompañado de su señora esposa doña Lula y de sus hijos Alejandro y Fernando, fueron formidables anfitriones este sábado 16 de este noviembre de 2013 para que los Cronistas e Informadores Taurinos de Aguascalientes A.C. (CITA) le correspondieran al matador de toros defeño Juan Luis Silis por el brindis que le hiciera a la agrupación el pasado domingo 28 de julio en el coso charro taurino Xonacatique de Jesús María, Aguascalientes, de la faena de una oreja al toro llamado “Alebrije” de Puerta Grande.

Sin embargo, más allá de la reunión con el torero, fue el reencuentro por vez primera de Juan Luis con el campo bravo luego de haberse cumplido exactamente un mes y tres días de la terrible cornada que el toro “Peletero” de José Julián Llaguno le infiriera en la cara el pasado domingo 13 de octubre cuando toreaba en el coso Monumental Vicente Segura de Pachuca, Hidalgo, dentro de la afamada Feria de San Francisco.

Los momentos y las escenas fueron de profunda emotividad pues al saberse que el torero aún no está listo físicamente para torear, él no quiso pasar la ocasión de volver a pulsar una muleta y un ayudado, y así lo hizo cuando pisó el tentadero de la ganadería y vio que en el burladero principal había una sarga y una espada simulada, propiedad del diestro retirado Paco Olivera “Bombita”. Se fue hacia él, descolgó la pañosa, tomó el ayudado, armó el engaño y se dio a hacer el toreo al toro del alhelí, al toro de la ilusión. Fueron tan sólo dos tandas, una por el derecho y otra por naturales, pero suficientes para enriquecer el alma, el espíritu y el corazón de un torero hombre, de Juan Luis Silis, quien visiblemente emocionado externó que le pesaron los avíos pero sintió como el alma le volvió al cuerpo y se sintió lo que es él ¡torero!

Posteriormente, bajo ese mismo clima de calor humano, de respeto por el héroe de los ruedos, del milagro hecho hombre, Juan Luis ofreció algo parecido a una rueda de prensa, misma en la que respondió a las preguntas que varios de los socios de CITA le hicieron con toda la intención por saber de sus sentimientos y reflexiones sobre los duros y difíciles momentos que vivió a causa del gravísimo percance que lo tuvo al borde de la muerte y que terminó por hacerle el diestro su mejor faena.

Acompañado de su inseparable apoderado, Fernando Rosique, el espada iztacalquense dijo, entre otras cosas, que el coso Monumental “Vicente Segura” de Pachuca, Hidalgo, ha sido el más importante en su carrera por que le ha permitido probar la miel y la hiel del toreo. La miel por el triunfo que obtuvo aquel mes de octubre de 2012 cuando le cortó las orejas al toro “Gato” de Caparica, tarde que le dio la oportunidad de torear en un año quince corridas. Y la hiel por el amargo pasaje que vivió cuando el toro “Peletero” de José Julián Llaguno por poco y le arranca la cabeza pero que gracias a esa coyuntura tiene toda la confianza en que ello le reditúen otros quince o más contratos pues su vida es torear, ser matador de toros.

Asimismo, confesó Silis que volvió a nacer tras vencer a la muerte y que ello le cambió la vida de manera radical, le ayudó a valorar mejor las cosas que tiene y que quiere tener, además de estar cierto de que por algo sigue con vida en este mundo.

Otra parte llena de sensibilidad fue cuando recordó como su mentor maestro y padrino de alternativa, el malogrado Mariano Ramos, le enseñó el respeto que se le tiene que tener al ganado bravo y como dirigirse a él, además del encuentro que tuvo él con su maestro en los momentos más críticos de su convalecencia diciéndole que no lo quería con él, que bajara al mundo terrenal para seguir siendo lo que él más desea y ama ¡ser torero!

Finalmente, Juan Luis Silis agradeció todas las manifestaciones de afecto y cariño que CITA y sus invitados al convivio en Rosas Viejas le manifestaron, a la vez que tanto el ganadero Fernando Topete y su señora esposa doña Lula le desearon todo tipo de parabienes y le ofrecieron el rancho para que sea ahí donde se pruebe por vez primera tentando una vaca y a lo que Juan Luis contestó que ello podría ser en enero de 2014 pues los doctores que lo atienden, gracias a su milagrosa recuperación, le han dicho que de seguir así, en ese mes de enero venidero podría empezar su rehabilitación física y taurina.

De igual manera, el presidente de los Cronistas e Informadores Taurinos de Aguascalientes A.C., Joaquín Chávez, le externó palabras de agradecimiento y aliento para seguir adelante a nombre de la agrupación, así como entregarle de la misma manera, en representación de CITA, una bella fotografía en la que está instrumentando un estupendo natural a un ejemplar de la ganadería de Rosas Viejas, de nombre “Abrileño”, en la corrida de la Oreja de Oro del pasado martes 30 de abril en el marco de la Feria Nacional de San Marcos y un bello capote de paseo, obra del maestro Bernardo Rodríguez, que tiene la imagen de la Virgen de Guadalupe, y que cuando recibió ambos obsequios ya no pudo más contener el llanto por tan increíbles muestras de cariño y hacer saber que era la primera vez que le regalaban un capote de paseo. Sin duda, instantes de gran emotividad.

Pasada esta charla, más que rueda de prensa con el milagro de la torería nacional, se pasó a degustar, a pesar de la caída de tres aguaceros y baja temperatura, de una cálida, suculenta y sabrosa paella elaborada con extrema destreza por el chef Manolo Ayala. En fin, una tarde en la que Rosas Viejas y los Cronistas e Informadores Taurinos de Aguascalientes fueron testigos del reencuentro con el campo bravo del sin par diestro Juan Luis Silis, quien no olvidará nunca esta experiencia que le alimentó su vocación torera. ¡Enhorabuena!

Por: Adiel Armando Bolio