Triufa Castella en 70 Aniversario de La México

Ciudad de México, Febrero 05 (2016).-Ignacio Garibay (caña y oro) con el que abrió plaza de Manuel Martínez, estuvo firme y demostrando oficio ante un toro que desde los primeros lances rodó por la arena igual que con la muleta, sin embargo Garibay logró ejecutar muletazos de gran calidad incluyendo un par de dosantinas que calaron en el tendido rematando con una estocada hasta las cintas escuchando petición de oreja que no fue concedida quedando con una salida al tercio. En el cuarto de la noche de la ganadería de La Estancia de nueva cuenta dio muestra de su oficio y madurez para estructurar la faena adecuada a las condiciones del toro pero mal logro su actuación con el acero y todo quedó en el aplauso del público.

Sebastian Castella (tabaco y oro) lidió en su primer turno a «Amoroso» de Manuel Martínez, un toro complicado con el que se percibía el peligro, algo que no pasó en las 16 corridas anteriores, por lo que en todo momento el público estuvo pendiente de lo que realizaba el francés en el ruedo siendo prendido de la entrepierna ocasionando un puntazo en el escroto, a pesar de ello, el torero siguió frente al astado hasta pasaportarlo de una estocada trasera para retirarse a la enfermería entre aplausos del respetable. Se corrió turno y lidió al sexto de la noche con el que hizo un quite por chicuelinas muy ajustado; ya en la muleta al darse cuenta de la poca posibilidad de triunfo regaló un toro de la ganadería de La Joya de excelente estampa y buen juego con el que mostró ese toreo de planta firme, de poder y profundidad acompañado de estética por lo que se escucharon los olés mas fuertes de toda la noche. La faena estuvo cargada de emoción, más aún al saber que el galo traía el cate pero tiró de raza para salir de la enfermería a por todas y así lo hizo, tirandose a matar sin atender a la petición de indulto de un sector del público y que en honor a la verdad no merecía el de La Joya. Dos orejas para Castella y vuelta al ruedo al toro.

Arturo Saldívar (turquesa y oro) recibió al tercero de la noche del hierro de Manuel Martínez con una larga de rodillas pegado a tablas y luego con la muleta tuvo un inicio de faena prometedor con pases cambiados por la espalda en los medios pero a partir de ahí el toro iba poco entregado a la muleta con embestidas inciertas por lo que Saldívar poco pudo hacer. Su segundo se rompió el pitón al salir de toriles y fué sustituido por otro del mismo hierro con el que el joven diestro repitió la historia.

Información: @Gerardo_Munoz_1

Foto @LaMéxico.com