Opiniones 

Real de Catorce: @ahumadaroberto

Cercano al Cedral en San Luis Potosí un estado que arropa vistas hermosas y una geografía digna de envidia mundial, se encuentra un lugar mágico, un lugar único que aparentemente está en el olvido del pueblo mexicano, Real de Catorce.

Este pueblo que tuvo como actividad principal la minería y que posteriormente quedo como un pueblo fantasma, contiene un simbolismo y un misticismo único en el mundo, su calles empedradas su arquitectura de hace un siglo y sus caminos siempre transitados por idealistas de otros países que lo observan con una maravilla y un lugar sagrado.

No es un pueblo extenso pero cada centímetro hace reseña y referencia de una introspección y de un encuentro necesario que el ser humano debe tener consigo mismo en algún momento de su vida.

La gente de Real de Catorce es amable, es cálida y respetuosa de su hogar sagrado, en oriente se encuentra el pueblo fantasma en donde solo quedan ruinas y un mirador poco usual, en el centro entre múltiples hoteles que hospedan a extranjeros y a mexicanos aventureros se encuentra la casa de moneda y el templo en cual se celebran bodas constantemente de gente de todos lados.

Al poniente se encuentra el camino al desierto, a ese lugar sagrado para los Huicholes en donde plasman su danza sagrada y consagran su andar para las ceremonias, al sur se encuentra un punto de energía fantástico y maravilloso, el cerro del quemado al cual se llega después de 45 minutos del pueblo y en donde a las 7:15 se aprecia un amanecer perfecto casi con geometría euclidiana, justo en la cima existen unos imponentes círculos concéntricos en los cuales

Por: Roberto Ahumada