Congruencia le piden al diputado Mario Delgado Carrillo / Vale al Paraíso

A casi todos los gobernantes y políticos les ataca el Alzheimer de manera temprana. Les falta honradez intelectual. Les sobra incongruencia porcina. Son como esos vaqueros del viejo oeste que entran envalentonados a pedir un tequila doble, aunque al cabo del tiempo, en esa misma cantina, se encuentren atendiendo humildemente a los clientes, porque no es lo mismo tomárselas que servirlas.

El legislador de Morena, Mario Delgado Carrillo, influyente coordinador del Grupo Parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados, tiene la posibilidad de convertirse, en estos momentos, en el borracho, en el cantinero, o en la versión azteca de San Francisco de Asís, el venerado protector de los animales.

Recordemos esta lejana historia de 2013.

La transmisión televisiva de la entrega del Paquete Económico 2014 y la Reforma Hacendaria les hizo guardar silencio. Pararon orejas. Atentos escucharon. El tema llamó su atención. Era muy delicado. Estaba en juego el sustento de ellos y su descendencia.

En la Iniciativa remitida al Congreso de la Unión por el Presidente de la República, se hablaba de reformar la Ley del IVA para aplicarlo a la compra de perros, gatos, especies menores y los alimentos que éstos consumen.

Las personas que hacen esas compras “reflejan capacidad contributiva y, en consecuencia, se trata de manifestaciones de riqueza que deben ser gravadas”, justificó torpemente la Iniciativa.

Nuestra Familia Perruche puso cara de what inmediatamente. Gobernador, Luna, Houidini y Cookie, de raza Pug, pelaron su redondos ojos, de por sí grandes. Estaban asustados. Después enojados. Ladraron hasta que el cansancio los venció para padecer La Noche de las Orejas Calientes.

Uno de los férreos opositores a la propuesta del gobierno federal fue, precisamente, el entonces senador Mario Delgado Carrillo, quien fustigó los argumentos de la SHCP. Le llamó “impuesto de ocurrencia”. A punto estuvo de
encabezar la Cruzada Nacional Contra la Inanición Canina. Y organizó en la Cámara de Senadores, el 21 de octubre de 2013, el foro Juntos somos su voz ¿IVA en Alimento para animales de Compañía?, para analizar y debatir el satánico engendro fiscal.

Seguramente, el hoy congresista federal por Morena, debe recordar la
exposición de Marcos Pérez, de la asociación Consultor de Empresas
Productoras de Alimentos, quien “calificó de falso que sean las clases altas las
únicas afectadas por este gravamen”, y presentó datos irrebatibles: el 73 por ciento son animales de compañía; en 92 por ciento de los hogares con mascotas se encuentra alimento procesado; y “hay más mascotas en los hogares que niños menores de 10 años” (SDP Noticias, 21/10/2013).

En el Aguascalientes de 2013, dos terceras partes de los hogares poseían, al menos, un animal de compañía. Ese año existía una población de perros y gatos mexicanos de 27 millones. 14 millones, el 52 por ciento, tenía un hogar.

Los 13 millones restantes vivían en la informalidad. Después de aprobado el IVA a los alimentos, otros millones de animales fueron echados a las calles, a la perra vida.

Mario Delgado Carrillo tiene en sus manos de leñador la posibilidad de ver materializada su voluntad política de 2013 y cabildear con el secretario de Hacienda Carlos Urzúa Macías, oriundo de Aguascalientes, el derribo de ese impuesto en el Paquete Económico 2019 para que “no que no le quede ni una coma”, como sentenció de la Reforma Educativa.

Diciembre mostrará a las mascotas si este diputado de Morena —supuesto defensor del Pueblo bueno de la Cuarta Transformación— pertenece a la escasa legión de gobernantes y políticos congruentes, porque cambiar de opinión en este tema sería inmoral, continuaría afectando emocionalmente a niños, adultos, y a quienes tiene un animal de apoyo, como es el caso de personas con alguna discapacidad.

Porque alguien debe de escribirlo: El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, tendrá un salario mensual de 108 mil pesos.

Desafiando la ley de la gravedad política el gobernador de Aguascalientes, Martín Orozco Sandoval, se anota en la propuesta de Paquete Económico 2019 el sueldo de hasta 266,194 pesos. Y la alcaldesa capitalina María Teresa Jiménez Esquivel, por poco, hasta le pondrá de su bolsa —comprada en el Buen Fin, obvio— al devengar 76 mil pesos mensuales el año próximo.

El Oscar salarial 2018 se lo llevaron los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por obtener el impúdico sueldo mensual de 651 mil pesos.

En salarios burocráticos se rompen géneros.

marigra1954@gmail.com