Lo que verdaderamente importa
«Al final no son los años de tu vida, sino la vida de tus años”: Lincoln
El presente texto tiene como principal finalidad tomar las letras en un sentido particular de reflexión, estas letras no son motivadas por alguna circunstancia política de poca monta o de alguna particularidad económica que haga esgrimir la esencia del humano en un sistema que pretende los derechos humanos y condena a la existencia misma en el individualismo característico de los tiempos modernos.
En muchas de las ocasiones vivimos en la angustia y en la presión, todo esto partiendo de meras hipótesis de cosas que aún no suceden, de este modo el ser humano condena el presente. Lo único que tenemos seguro en esta vida es la muerte y la incertidumbre. También es muy característico arrastrar el presente con las ínfulas del pasado.
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Comúnmente un grupo de personas y un servidor hemos tomado como actividad habitual llevar cena al área de urgencias del hospital tercer milenio.
El viernes fue verdaderamente crudo y reflexivo el momento de llevar la cena, horas antes me había tocado ver a una ambulancia en lo que parecía un accidente de magnitud mayor, resulta que horas después de ver el accidente o los daños de este mismo, cuando estábamos en el hospital entregando la cena y el poema de Mario Benedetti el de “no te rindas” una señora después de leer el poema soltó el llanto y me dijo que en unos minutos pasaría a despedirse de su hermano de 32 años ya que había sufrido un accidente terrible en motocicleta, pues resulta que el accidente que me tocó ver fue precisamente el de su hermano. Todo está conectado, no debemos ser ajenos a lo que le sucede a las personas que nos rodean o las personasque simplemente son próximos a nosotros.
La mirada de la señora tenía angustia y un gran dolor, en verdad muchas veces no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos, en verdad muchas veces nos valoramos lo que verdaderamente es importante en esta vida.
La paradoja del tiempo siempre nos lleva a la reflexión de que; debemos de creer en algo y que esta vida es para hacer cosas hermosas.
Hay tiempos que nos devuelven la vida y otros que nos la arrancan.
Hay tiempos que no sabemos ni que pasaron y otros que nunca queremos dejarlos pasar.
Hay tiempos en los que queremos que se gasten los minutos y otros en los que queremos que sean eternos.
Hay tiempos que casi nunca avanzan y otros que ni los vemos. Hay tiempos que van muy lentos y otros que van muy rápido.
El tiempo se manifiesta en ciclos ajenos a la mente. Existen dos tipos de tiempo que marcan el camino de la humanidad en conexión con el universo.
El tiempo psicológico, ese donde el pasado y el futuro devoran vidas, y el tiempo de la naturaleza, marcado por ciclos y las manecillas del reloj, me gusta llamarle presente
En este último pasa lo que a cada instante se conecta con tu respiración y el latido de tu corazón, la mera vida.
De tal modo es menester aprovechar este instante de tiempo que le llamamos vida y enfocarnos en lo que verdaderamente importa.
IN SILENTIO MEI VERBA.