Opiniones Portada rotador 

¿Obras al 100?: el inconcluso desnivel de Universidad

Atrás quedó la tala de añejos árboles. El ecocidio perverso. Los pajaritos en el piso del estacionamiento de plaza Universidad, a la espera de las ramas que nunca volverán. Las manifestaciones de los defensores del medio ambiente. El rugido de los vecinos inconformes por la imposición. El repudio de los molestos ciudadanos porque nadie los convocó para informarles al detalle del proyecto. Y la opinión autorizada del aguascalentense egresado de la maestría en Planificación Urbana por la Universidad de Harvad.

Ayer, aprovechando los días de reflexión impuestos por la legislación para acudir mañana a la votar, el gobernador Martín Orozco Sandoval agarró la tambora electoral para entregar —antes se llamaba “inaugurar”—, sin el menor recato legal y moral, la inconclusa obra del paso a desnivel en el cruce de las avenidas Universidad y Luis Donaldo Colosio, a la altura del fraccionamiento Campestre.

Los drones empezaron a sobrevolar a temprana hora la desforestada zona. De automóvil de la televisora estatal bajaron los camarógrafos para cubrir el gran evento electoral, como en los tiempos del ex gobernador Carlos Lozano de la
Torre, que acudió en el camión utilizado en sus giras para acompañar a sufragar al candidato priista Gregorio Zamarripa Delgado, en la elección federal de 2015.

Nada nuevo bajo el sol. Es el mismo proceder pero con camiseta de distinto color. En lucha electoral, a veces irracional, se vale todo, hasta transgredir la ley y romperle la virginidad a la veda electoral.

El apuro es mucho. La ansiedad por empujar la modesta lancha que no habrá de llegar a buen puerto, se sale de control. La Presidencia de la República no vale eso y un poquito. La ineficiencia gubernamental obliga a entregar la obra en incomodas parcialidades, en detestables abonos.

El gobierno estatal incumplió su palabra. La edificación total del paso a desnivel concluirá hasta el año próximo, en 2019. Mientras, se continuará trabajando en el remedo de obra inaugurada ayer, aunque se ponga en peligro la vida de los automovilistas que transiten en los carriles de circulación subterráneos, porque en la parte superior todavía faltan de colocar bolardos, parapetos y otros elementos de concreto factibles de desprenderse, aunque eso sí: el acuario con sus peces de mil colores ya está listo y funcionando perfectamente, según las inundaciones ocasionadas por las copiosas lluvias.

A juzgar por la inexplicable plazoleta colocada encima del paso a desnivel, se suspenderá la vuelta a la izquierda para entrar a Campestre, Vergeles y La Herradura, a los autos que transiten por Universidad; quizás, tendrán que seguirse por Miguel de la Madrid hasta llegar a Jesús María para retornar y llegar infelizmente a casa.

No importa. Como en los tiempos del ex gobernador Lozano de la Torre, después del recorrido inaugural, se organizó en la Casa de Gobierno la gran comilona para festejar y recordar tácitamente a los invitados el sentido de su voto en plena veda electoral.

Los automóviles de los invitados invadieron las calles del fraccionamiento Vergeles, como en el sexenio de Carlos.

Por la saturada caseta de vigilancia pasaron los “visitantes”. Se registraron con el policía. Entregaron una identificación. Estacionaron la troca. Llegaron a la puerta de acceso a los jardines la residencia. La trabajadora de gobierno les dio acceso, siempre y cuando estuvieran anotados en la añorada lista. A los gorrones piratas les dieron una patada en el trasero y los regresaron por donde vinieron.

El caos vial iniciado en enero de 2018 continuará hasta enero de 2019 —dice el funcionarios que deshonra su palabra—, cuando al paso a desnivel se agregue la horrenda “gaza” o “vialidad elevada” —primer piso, pues—, para conectar a Colosio con Universidad, en pleno proceso electoral para elegir a los alcaldes en el estado de Aguascalientes, informó el titular estatal de la Secretaria de Infraestructura y Comunicaciones (Sicom).

Fernando Granados, maestro en Planificación Urbana por la Universidad de Harvad, en su texto Sicom o cómo moverse en falso (La Jornada Aguascalientes, 26/10/2017), parafraseando a Edward Glasear recordó que “Las verdaderas ciudades están hechas de carne y hueso, no de concreto”.

Porque alguien debe de escribirlo: Por México a votar mañana.

marigra1954@gmail.com